Si quieres adoptar un perro viejo, no sólo es una buena acción, sino que seguro que tendrás un nuevo amigo agradecido en tu vida. Los beneficios de tener un perro viejo son muchos. Aquí tienes cinco buenas razones para adoptar a un anciano de cuatro patas.
Si quieres tener un perro, quizá pienses primero en un lindo cachorrito. Sin embargo, los perros mayores no son menos adorables e incluso tienen ventajas sobre los jóvenes. En cualquier caso, no existe un “mejor” o “no mejor”: cada uno debe saber por sí mismo a qué compañero animal le gustaría dar un hogar.

Obtienes lo que ves
Cuando adoptas a un perro anciano, no recibes un cerdo en un charco, sino un perro que ya tiene un carácter entrenado. Gracias a su experiencia, un guau senior suele ser muy estable y no cambia demasiado, como suele ocurrir con un cachorro. Tampoco cambiará mucho visualmente, salvo que al viejo amigo de cuatro patas le pueden salir unas cuantas canas más.
Adopta un perro viejo y disfruta de la paz y la tranquilidad
Una cosa primero: aunque un perro sea mayor, no significa que se quede tumbado en un rincón dormitando. Muchos perros ancianos son muy activos hasta la vejez y necesitan ejercicio físico y mental. No obstante, un perro anciano suele ser mucho más tranquilo y relajado que uno joven. Tienen menos abejorros en el trasero y afrontan muchas situaciones de forma más relajada, lo que les hace muy sociables. Además, los lobos domésticos mayores no suelen necesitar tanto ejercicio como los perros jóvenes. Por eso, los perros viejos también son muy adecuados para los humanos mayores, que también pueden alegrarse de no tener que dar siempre el gran paseo.

Mucho amor y gratitud
Si adoptas un perro viejo de un refugio -posiblemente uno que no siempre ha tenido una vida fácil- puedes estar seguro de una cosa: Tu perro te estará eternamente agradecido. Un perro rescatado sabe que debe mucho a sus salvadores. No sólo ganará un compañero leal, sino que también recibirá mucho amor.
Un perro viejo no necesita aprender mucho más
Aunque adoptes un perro viejo, tendrás que darle la educación adecuada. Sin embargo, un amigo de cuatro patas con experiencia ya ha aprendido muchas cosas en la vida y, en el mejor de los casos, ha interiorizado los fundamentos del adiestramiento canino. Por supuesto, como todos los demás puntos aquí expuestos, esto no se aplica a todos los peludos: al fin y al cabo, cada perro es diferente y tiene una historia de vida muy individual. Algunos perros han sido adiestrados mejor que otros.

Los perros viejos quieren aprender mucho
Incluso los perros viejos pueden y quieren aprender trucos nuevos. El hecho de que un amigo de cuatro patas ya tenga mucho bajo la manga no significa que su sed de conocimiento y su sed de acción estén satisfechas. Desde trucos, pasando por deportes caninos (para mayores), hasta asumir determinadas tareas, los perros mayores no son en absoluto aburridos.
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