El dálmata es un perro inteligente, atlético y orientado a las personas. Mantenerlos requiere un equilibrio saludable entre mucha atención de sus humanos, ejercicio al aire libre y una variedad de actividades para su cerebro.
Los dálmatas están en forma, son ágiles y resistentes, ya que antiguamente se les utilizaba para correr junto a los carruajes para protegerlos de ladrones y otros enemigos. Por tanto, no sólo hay que tener en cuenta su necesidad de correr a la hora de tenerlos.
El dálmata: un perro para familias activas
Este fiel cuadrúpedo moteado se siente más a gusto en un hogar en el que haya mucho movimiento y en el que esté solo lo menos posible: El dálmata está en buenas manos con una familia activa, sobre todo si también vive en una casa con jardín vallado.
Dormir al aire libre no es propio de los representantes de esta raza canina. Tienen un pelaje demasiado fino y realmente necesitan el vínculo familiar. Mantener su estatura atlética también debe desempeñar un papel en el mantenimiento del dálmata.
Asegúrate de que tu perro tiene una dieta sana y equilibrada, y no alimentes en exceso a tu dálmata: el sobrepeso no es bueno para el perro deportivo nato.
La necesidad de ejercicio y actividad del dálmata
El amigo de cuatro patas manchado necesita al menos dos horas de ejercicio al día para ser amistoso y equilibrado. Los paseos largos son estupendos para él, pero también es un buen compañero para montar en bicicleta y hacer footing.
Le encanta estar al aire libre y hay que darle mucha variedad, sobre todo si se le mantiene dentro de casa (que no es lo ideal para él). A veces a la playa, a veces al bosque, a veces a la montaña: eso es lo que hace divertida la vida del dálmata.
Puedes mantener ocupado a tu fiel cuadrúpedo con deportes caninos como el agility o el adiestramiento con clicker. Pero al vivaz dálmata también le encantan los juegos clásicos, como buscar y traer… como con tantas otras cosas, todo depende de la mezcla: ¡Todo depende de la mezcla!
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