Es un tema muy debatido entre los dueños de perros: ¿debes llevar a tu perro con correa cuando lo sacas a pasear? ¿O esto le limita y es más apropiado dejarle correr libremente? Sigue leyendo para saber por qué hay buenas razones para llevar al perro con correa cuando lo sacas a pasear.
Si llevas a tu perro con correa cuando salís de paseo, no significa que tu fiel cuadrúpedo se porte mal y no sepa comportarse cuando corre libre. Se trata sobre todo de la seguridad de tu amigo animal. Por ejemplo, es probable que en tu paseo te encuentres con otras personas que pueden tener miedo de los perros. Una correa protege contra colisiones desagradables.
Seguridad en los paseos
Debes llevar a tu perro con correa, sobre todo cerca de las carreteras, pues siempre puede ocurrir que huela o vea algo interesante o se asuste. Entonces puede olvidar su buen adiestramiento y salir corriendo a la carretera. Por un lado, tu perro resultará herido en un accidente, pero por otro, el conductor del coche que le atropelle accidentalmente también sufrirá.
Pero también es más seguro llevar al perro con correa cuando salgas a pasear por senderos, bosques o parques. Si se asusta o se distrae, el riesgo de accidente no es tan alto, pero podría escaparse, por ejemplo. Además, es inquietante para los animales salvajes en la naturaleza si de repente se dan cuenta de que hay un perro cerca.
También es posible que el perro quiera saludar alegremente a otros perros, pero estén asustados o enfermos. O puede correr con curiosidad hacia un transeúnte al que no le gustan los perros o incluso les tiene miedo.
Por desgracia, tampoco sabes nunca si alguien que odia a los perros ha puesto cebos envenenados que tu perro suelto puede comer antes de que te des cuenta. Todas estas razones hablan en favor de llevar al perro con correa.
Llevar al perro con correa: ¿cuestión de educación?
Algunos opositores radicales a las correas pueden argumentar que su perro está bien adiestrado y les hace caso, así que ¿por qué deberían llevar a su perro con correa? Normalmente, un buen adiestramiento del perro es suficiente para garantizar que no haya problemas si tu fiel cuadrúpedo anda suelto durante un paseo.
Sin embargo, los perros tienen sentidos mucho más finos, son más sensibles que los humanos y se guían mucho más por sus instintos. En consecuencia, las reacciones y el comportamiento de un perro no pueden predecirse con un cien por cien de certeza desde una perspectiva humana, y pueden producirse accidentes o encuentros desagradables a pesar de su obediencia.
Sin embargo, un adiestramiento adecuado puede ayudarte a acostumbrar a tu perro a la correa. Si se siente seguro con la correa y confía en ti, no le importará pasear con correa.
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