El Cane Corso -también llamado Mastín Italiano- es un perro grande y fuerte, de temperamento tranquilo y con un marcado instinto de guarda.Si quieres adquirir un representante de esta raza, debes conocer bien sus características.
Cualquiera que conozca a un Cane Corso bien educado probablemente se sorprenderá de que este perro tranquilo y de naturaleza amistosa esté clasificado en algunas regiones alemanas como perro de lista y, por tanto, como potencialmente peligroso.
Con dueños experimentados, el Cane Corso desarrolla un carácter muy agradable.
En las manos equivocadas, sin embargo, su pronunciado instinto guardián y protector también puede convertirse en algo negativo.
Cane Corso: un guardián apasionado
Este fuerte cuadrúpedo italiano es un perro leal que prefiere no separarse de su dueño.Por otra parte, suele mostrarse bastante desinteresado por las personas que no conoce.Puede ser distinto si el Cane Corso las ve como una amenaza para sus dueños, su casa o su patio.
Es un perro guardián con alma y corazón, y defiende todo aquello de lo que se ve responsable.Aquí corresponde a sus dueños, con un adiestramiento y una socialización muy buenos, convertirlo en un perro fiable que confíe en su amo y mantenga siempre la cabeza fría.
En resumen, este perro necesita dueños experimentados que sepan fomentar desde el principio sólo las mejores cualidades del perro, desalentando al mismo tiempo los comportamientos indeseables.Un perro de familia adorable con un buen adiestramiento
En las manos adecuadas, el Cane Corso es un perro cariñoso con los niños, paciente y leal.Le encanta que le acaricien y es fácilmente adiestrable si se le trata con cariño, coherencia y justicia.
Muestra su naturaleza juguetona y su alegría de trabajar siempre que puede: cuando retoza, en los deportes caninos y en tareas responsables como el adiestramiento para ser perro guardián.
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