El Doberman es un perro grande y fuerte, de carácter leal y adorable, pero también es alerta y tiene un fuerte instinto protector. Para ser un perro dócil y cien por cien fiable, depende del trato correcto y experto de su amo.
Un doberman bien adiestrado es un gran perro: este fuerte amigo de cuatro patas nace con un carácter tan amistoso como cualquier otro perro. Por supuesto, su tamaño, su estatura y su instinto de guarda pueden hacerlo más peligroso de adulto que un chihuahua, pero sólo si está mal adiestrado.



El Doberman: Sensible, leal e inteligente
Cariñoso, aficionado a los niños y fácil de manejar: así se muestra este perro grande y musculoso como perro de familia bien educado, guiado con cariño por su persona de referencia permanente. Es sensible, dócil y compatible con otros animales si ha sido bien socializado desde cachorro. Enseñarle es un placer, ya que es inteligente, atlético, obediente y disfruta aprendiendo trucos o desahogándose en deportes caninos como el agility o la obediencia.
Alerta y atado a una persona
El Doberman es alerta, seguro de sí mismo e intrépido por naturaleza. La lealtad a su humano también significa que siempre le protegería -es importante que sólo lo haga cuando realmente deba hacerlo, y es su dueño quien decide sobre esto, no él-.
Para que estas características no se conviertan en algo negativo (por ejemplo, porque juzgue mal una situación y confíe más en sus propios sentimientos que en los de su dueño), es importante que tenga un cuidador fiable, tranquilo y con experiencia canina, que sepa exactamente lo que hace cuando se trata de adiestramiento de perros.


¿Es el Doberman la raza de perro adecuada para ti?
El dóberman no es adecuado para principiantes, porque debido a su inteligencia, estado de alerta y valentía, toma sus propias decisiones cuando se produce un adiestramiento incoherente e inseguro, lo que a veces puede ser peligroso. Sobre todo porque puede infligir heridas graves con su fuerza y tamaño corporal, si llega a morder porque cree que tiene que defender a su familia. Lo ideal es que traigas a tu cachorro de doberman a casa a las ocho semanas de edad y empieces a adiestrarlo inmediatamente para que sepa lo que puede hacer y lo que no.
Sin embargo, la socialización debería empezar ya en el criador, que presenta a los pequeños cachorros a ruidos cotidianos, gente extraña, otras mascotas, etcétera.
Por tanto, también es necesario investigar a fondo antes de comprar, para que no sólo encuentres un criador reputado, sino también uno con cuyos objetivos de cría estés de acuerdo. Algunos criadores de Doberman ponen más énfasis en el estado de alerta de este amigo de cuatro patas, otros intentan criar Dobermans especialmente bondadosos entre sí, que luego son más fáciles de criar como perros de familia.


Un Doberman es una raza de perro estupenda para ti si se cumplen los siguientes puntos:
- Tienes experiencia con perros y su educación.
- Dispones de tiempo suficiente para practicar deportes caninos con tu Doberman y para ejercitarlo de forma adecuada a su especie, tanto mental como físicamente.
- También estás dispuesto a mantener a tu perro dentro de casa y no en una perrera pura, para que tu Doberman tenga contacto familiar y no desarrolle una desconfianza general hacia las personas.
- Todos los miembros de la familia están de acuerdo en adquirir un Dobermann y están dispuestos a colaborar en su educación y a responsabilizarse de su amigo de cuatro patas.
- Tienes la oportunidad de dar largos paseos



Reply