El pug es un perrito vivaracho que acompaña a sus dueños en las buenas y en las malas. Lee aquí las características especiales de este dulce perro de mirada inconfundible.
El Pug, llamado también en español carlino o doguillo, casi siempre parece estar de buen humor y, con sus cualidades cariñosas y encantadoras, es un perro para toda la familia.
Es adaptable, pero un amigo de cuatro patas que necesita estar cerca de su humano: estar mucho tiempo solo no sería nada para este perro leal.
El Pug Alegre, cariñoso y afectuoso.
A este perro orientado a las personas le gusta estar en todas partes y suele saber comportarse muy bien cuando está fuera. Es raro que algo le moleste, por lo que también es fiable cuando trata con niños.
No es de extrañar que este perro adaptable se sienta tan a gusto en las familias. Su convivencia es bastante sencilla y se le considera tranquilo y equilibrado, aunque también puede ser muy fogoso, porque le encanta jugar y a menudo hace reír a la gente que le rodea con su carácter adorable y algo travieso.
Nunca se aburre con este pequeño amigo de cuatro patas amante de la diversión. Como es sensible y empático, el trato cariñoso debe ser una obviedad, ya que sufriría mucho con cualquier otra cosa.
Comportamiento social y actividad
Al pasear y retozar por el jardín, verás a los representantes de esta raza canina activos, alegres y, en la medida en que sus condiciones físicas lo permitan, también deportistas.
El Pug es dulce y extrovertido, tanto con los humanos como con los animales. En los encuentros con otros perros, el pequeño amigo de cuatro patas es valiente y no tiende ni a la agresividad ni a la timidez. No obstante, sus dueños deben vigilarlo de cerca.
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