El husky procede del norte de Siberia y es principalmente un perro de trabajo. Sin embargo, su naturaleza es inteligente y amable, por lo que este gran amigo de cuatro patas también es adecuado como perro de familia.
El husky es más conocido como perro de trineo. Ésta es exactamente la naturaleza de esta raza de perro grande: es un animal trabajador, inteligente y lleno de energía.
Este perro fuerte y poderoso de Siberia es muy capaz de aprender, pero no debes esperar de él una obediencia absoluta, como harías de un pastor alemán. La voluntad propia del Husky se lo impide.
Carácter del Husky: No es un buen perro guardián
Estos amigos de cuatro patas son muy confiados. Ya sean conocidos o desconocidos, no son realmente tímidos con nadie. Es precisamente esta franqueza lo que a muchos aficionados a los perros les gusta tanto del Husky. Sin embargo, ten en cuenta que el hermoso husky no es adecuado como perro guardián.
Sin embargo, debido a sus orígenes como perro de trineo, está acostumbrado a trabajar. Si está bien adiestrado, puede arrastrar hasta nueve veces su propio peso corporal. Pero también le gusta realizar otras tareas. Los paseos largos son importantes, porque el Husky necesita ejercicio y ejercicio adecuados, lo que se debe a su origen como perro de trabajo.
Con un buen adiestramiento tiene un carácter muy agradable.
Sin embargo, es importante que el amigo de cuatro patas esté impecablemente adiestrado. Especialmente con los perros grandes, es importante que oigan perfectamente para que tú, como propietario, no te veas en una situación desagradable.
Aunque el siberiano se considera muy autosuficiente e independiente, sigue siendo importante que reconozca quién es el amo en la casa. Sin embargo, si empiezas con un buen adiestramiento cuando el perro aún es un cachorro, este manojo de energía no suele tener problemas para convivir con niños u otros perros.
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