Un pastor alemán es un perro grande y poderoso, con un carácter fuerte y valiente. Si lo mantienes de forma adecuada a su especie, lo adiestras bien y lo socializas, tendrás en él una mascota maravillosa, amistosa y tranquila.
El pastor alemán es normalmente un contemporáneo muy leal, cariñoso y que pasa por lo bueno y por lo malo con sus dueños. Además, muchas otras características le cualifican para ser un agradable perro de familia.
Pastor alemán: dócil, inteligente y amistoso
El carácter de este perro suele ser tranquilo pero seguro de sí mismo. Es amistoso y se lleva bien con personas y animales. Como es inteligente, dócil y está dispuesto a trabajar, no sólo es adecuado como perro de trabajo y de compañía, sino que también es fácil de adiestrar, aunque sus dueños deben ser constantes y saber lo que hacen al adiestrarlo.
Su naturaleza estable y robusta hace que el perro sea versátil. Activo e inteligente como es, necesita una actividad variada, que, al igual que algunos otros factores, es muy importante para que esté tranquilo y equilibrado.
Muy importante: mantener al perro de forma adecuada a su especie
Especialmente con un perro grande, inteligente y activo como el pastor alemán, tiene mucho que ver con su actitud y educación cómo se desarrolla su carácter. Una cría absolutamente adecuada a su especie, mucho ejercicio y una ocupación que le suponga un reto son importantes para el perro, su bienestar y, por tanto, también su comportamiento.
Es importante que el pastor alemán esté bien socializado desde el principio y que reciba un adiestramiento constante y experto para que sólo salga a la luz lo mejor de su naturaleza.
Reply