El Rhodesian Ridgeback es un perro grande y orgulloso, de carácter apacible. Su educación requiere constancia y sensibilidad, por lo que sólo es de utilidad limitada para los principiantes. Su nombre en español es perro crestado rodesiano.
Si quieres tener un Rhodesian Ridgeback, debes tener en cuenta que este perro era originalmente un perro de caza. Hoy en día apenas se utiliza para la caza y se suele tener como perro de compañía, pero el instinto de caza sigue presente. Además, este hermoso perro de cuatro patas se considera leal, inteligente e independiente. Necesita mucho ejercicio y actividad, de lo contrario sufre aburrimiento y puede desarrollar problemas de comportamiento.
La naturaleza del Rhodesian Ridgeback
Los perros de esta raza suelen ser seguros de sí mismos y valientes. Tienen una percepción rápida y son leales y fiables con sus cuidadores. Sin embargo, a pesar de su estrecho vínculo con su cuidador, suelen ser reservados con los extraños.
Gracias a su inteligencia y resistencia, al Rhodesian Ridgeback le entusiasma casi cualquier deporte canino, por ejemplo el agility. Sin embargo, también le gusta correr a su lado cuando hace footing o monta en bicicleta. También se dice que es bastante sensible y testarudo. Sin embargo, no suele ser ansioso ni nervioso.
No sólo es persistente, sino también ágil y valiente. Estas cualidades eran necesarias antaño en África para cazar leones y otros animales de caza mayor. El instinto protector y el estado de alerta también son ventajas de este ágil perro de cuatro patas. Sin embargo, el desarrollo de su carácter a lo largo del tiempo depende sobre todo de su educación. Esto es especialmente cierto en el caso de los miembros jóvenes de esta raza: el Rhodesian Ridgeback es un perro de desarrollo tardío: no se le considera adulto hasta los tres años. Como perro joven es un auténtico torbellino y rebosa energía, pero tiende a ser un poco demasiado confiado.
Adiestramiento del perro grande con marcas de anguila
Un Rhodesian Ridgeback que ha disfrutado de una educación buena, coherente y respetuosa con los perros es un compañero leal con un carácter afable y tranquilo. Si eres laxo o indeciso en cuestiones de adiestramiento, esto no le hace más bien que una mano demasiado dura. Así que sé claro y coherente con las normas y órdenes, pero también paciente y benévolo.
Los Ridgebacks suelen tener muchas ganas de aprender, pero perderán el interés si se sienten forzados o abrumados. Así que no seas demasiado autoritario con tu amigo de cuatro patas, evita todos los métodos de adiestramiento aversivos y trabaja con el refuerzo positivo en lugar del castigo.
En el mejor de los casos, el futuro propietario del Ridgeback es un experto canino que tiene experiencia con perros de caza y sus necesidades especiales. Quienes confíen en el adiestramiento sin tener esa experiencia quizá deban pedir consejo a un adiestrador canino. Mucho ejercicio y actividades variadas ayudarán a hacer del Ridgeback de Rodesia un compañero manso, bondadoso y fiable.
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