Un perro retozando en la playa suele ser comparable a un niño feliz en El Dorado de los juegos. Es especialmente divertido cuando se incluye el juguete acuático adecuado. Debes saber algunas cosas sobre los requisitos de los huesos de goma, los patos recogedores y similares.
Por supuesto, los juguetes acuáticos para tu perro deben poder hacer ante todo una cosa: flotar. Hay innumerables tipos de juguetes flotantes para perros en el mercado. Se pueden concebir de todas las formas y tamaños, por lo que no siempre es fácil seguirles la pista. Con los siguientes consejos, seguro que encuentras el modelo adecuado.
Juguetes acuáticos para perros: requisitos
Los juguetes de agua para perros no sólo deben ser flotantes, sino también estar hechos de materiales resistentes. Los muñecos de goma, caucho natural o neopreno son muy utilizados.
El agua salada, los dientes de los perros y la luz solar pueden pasar factura al juguete. Estos materiales garantizan que los frisbees, patitos de goma y similares sobrevivan mucho tiempo a la diversión de jugar en el agua.
Además de la durabilidad, al comprar nuevos juguetes para el agua también debes asegurarte de que sean fáciles de agarrar, es decir, que tu amigo de cuatro patas pueda meterse fácilmente el muñeco en la boca. Los objetos redondos y difíciles de agarrar, como las pelotas, suelen ser menos adecuados que los muñecos alargados, como los huesos de goma o los animales flotantes. Otra característica útil de los juguetes acuáticos: la visibilidad. Los colores llamativos son más fáciles de reconocer en el agua y facilitan su recuperación.
Diversión y juegos en la playa: consejos
No importa si tienes a mano un animal de goma, un frisbee u otro juguete acuático: A casi todos los amigos de cuatro patas amantes del agua les encanta jugar a buscar en las olas.
Importante: lanza el muñeco sólo lo suficientemente lejos como para que tu perro pueda nadar de vuelta a la playa sin problemas; si hay mucho oleaje, por seguridad sólo debes jugar en aguas poco profundas cerca de la orilla.
Si tienes un perro que aún no está familiarizado con el agua fría, los juguetes acuáticos pueden romper el hielo. Sólo tienes que atraer a tu perro friolero con cuidado desde la playa hasta el agua con el juguete: puede que a tu perro le guste el agua más de lo que pensaba. Si tu amado es un poco ansioso, ayuda que entres en el agua con él como compañero de juegos.
Reply